En el ocaso de la dinastía Ming, la corte imperial está plagado de corrupción como tiranos gobernantes. Con el imperio debilitado, la guerra es inminente. Para salvar a las víctimas de su sufrimiento, la hechicera Jade Raksha combate los funcionarios de la corte y al ejercito que oprimien a la gente para su propio beneficio.
Como venganza, funcionarios del gobierno local deciden asesinar al gobernador Zhuo Zhon Glian y culpar a Jade, ella y los miembros del Fuerte de la Luna se convirten en fugitivos buscados por un crimen que no cometieron.
Zhou Yi Hang, lider de Woudang y nieto de Zhuo Zhon Glian, emprende la busqueda de los verdaderos asesinos del gobernador.